Cuando efectuamos un cambio o ampliación de red distribuidora de agua potable, es necesario concretar los llamados empalmes que no son más que la unión de una cañerÃa con otra.
En nuestro caso, venimos realizando en varios puntos de barrio sur y norte porque son los lugares en los que se lleva a cabo la Renovación Histórica del sistema de agua con el fin de inyectar de una cañerÃa de mayor presión a otra de menor, equilibrar presiones o cerrar mallas de redes.
También trabajamos en otras zonas de la ciudad o de la provincia con el fin de mejorar el servicio que brindamos a nuestros usuarios.
Cuando iniciamos esta tarea, en muchos casos, se procede a dejar sin suministro las zonas aledañas a la obra puesto que las cañerÃas deben estar completamente vacÃas para poder unir las antiguas de hierro fundido, a las nuevas de PVC; material que está siendo utilizado por la SAT por su durabilidad.
Luego de cada uno de estos trabajos, que no son diarios ni habituales, sino la culminación de conexiones, debemos dejar correr el lÃquido por nuestras cañerÃas dado que hemos manipulado la roja con excavaciones propias de la impronta que impone cada proyecto.